
Como no teníamos suficiente con una pandemia, un par de volcanes y una invasión de Ucrania, ahora llega a nuestras pantallas (nunca mejor dicho) la intervención de Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank en Estados Unidos y la del banco suizo Credit Suisse en Europa.
Como no teníamos suficiente con una pandemia, un par de volcanes y una invasión de Ucrania, ahora llega a nuestras pantallas (nunca mejor dicho) la intervención de Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank en Estados Unidos y la del banco suizo Credit Suisse en Europa. Cuando parecía que los mercados ya habían asimilado la inestabilidad producida por aquellos acontecimientos y empezaba a aceptar el nuevo marco de tipos de interés y control de la inflación por parte de los bancos centrales, el sector financiero se ha tambaleado esta semana con los casos mencionados y ha introducido un nuevo factor de riesgo que ha ahuyentado a los inversores que han salido de las bolsas hacia refugios más seguros y de menos riesgo como el oro, ¿el bitcoin? y los bonos soberanos.
Aún siendo dos situaciones muy diferentes las de esos bancos, es evidente que el dinero es miedoso y sale corriendo a la primera de cambio, especialmente en un momento donde las economías se están todavía recuperando de una crisis profunda, sufriendo una inflación galopante, los niveles de deuda de los países es muy elevada y el margen de maniobra de los bancos centrales cada vez más limitado. Se juntan demasiadas incertidumbres en un momento bastante delicado.
¿Estamos ante una gran crisis financiera de nuevo? ¿Se repite la historia?
Yo creo que no. Es cierto que la subida de tipos de interés tan pronunciada y agresiva en el tiempo, ha generado inestabilidad en muchos de los balances de los bancos, especialmente en aquellas posiciones de deuda soberana (alta exposición de los bancos) que han visto aumentar sus pérdidas potenciales en el caso de tener que ser liquidadas (caso de SBV y Signature Bank) por su menor valor de mercado versus valor en balance.
Ello genera tensiones de liquidez ante la retirada agresiva de depósitos por parte de la clientela y obliga a vender a pérdida posiciones que de otra manera no se hubiesen liquidado. Pero los gestores de los bancos y los supervisores deben tener en cuenta esos riesgos y siempre obligar a tener una posición suficiente de activos líquidos (ratio de liquidez) que permitan hacer frente a esas situaciones. En mi opinión, en el caso de los bancos americanos, ha habido una falta de supervisión además de una mala gestión del balance del banco.
El caso de Credit Suisse es diferente, ya que arrastraba problemas desde hace tiempo en modelo de negocio y estrategia, y al estallar el miedo por la situación de los bancos americanos ha contagiado a los inversores en Europa que ha forzado su intervención y un rescate de liquidez de en torno a 50.000 millones de euros por parte del gobierno suizo a instancias del regulador. Ahora se baraja la posibilidad de que el banco UBS pudiese acabar comprándolo o incluso venderlo por partes a otros bancos interesados como Deutsche Bank o BlackRock (aunque estos niegan cualquier tipo de interés). Probablemente, Credit Suisse valga más vendiéndolo por partes que forzando una fusión con UBS, que al final de algo mucho más grande pero mucho más débil. Veremos como acaba el culebrón.
La pregunta que todos nos hacemos es hasta qué punto todo esto puedo contagiar al resto del sistema financiero. En el caso español y viendo la evolución de las cotizaciones bancarias (habían subido mucho desde octubre) vemos caídas en la semana de en torno al 14% de media con un IBEX35 cayendo un 6%. El más afectado ha sido el Banco Sabadell con una caída de casi el 21%, seguido de Bankinter del 16,5%, Unicaja casi con un 15%, BBVA con un 14%, Santander con un 13% y Caixabank con un 12%. Caídas significativas en cualquier caso, pero nada preocupantes teniendo en cuenta la recuperación en bolsa del sector bancario desde que los bancos centrales empezaron a subir tipos. Los bancos españoles están bien capitalizados y tienen el balance bastante equilibrado aún a pesar de tener pérdidas potenciales (como todos) en su cartera de bonos soberanos pero también una posición de liquidez (depósitos) bastante amplia para hacer frente al rescate de depósitos en el caso de que se produjese. De momento, no parece que la situación sea preocupante Desde la última crisis, los bancos y los supervisores han aprendido y han reforzado tanto los ratios de capital como los niveles de supervisión, lo cual les hace menos vulnerables que en el pasado,
Lo cual no quita que una espiral de desconfianza por parte de los inversores, pudiese provocar alguna situación aislada a futuro En cualquier caso, los bancos centrales parecen estar dispuestos a volver a facilitar liquidez al sistema financiero como ya hemos visto con las ventanas que ha abierto la Reserva Federal americana (FED) así como el banco central suizo en el caso de Credit Suisse. Todo ello a pesar de la reducción de balance que están ejecutando los bancos centrales y las subidas de tipos de interés para frenar la inflación. Estamos ante un escenario complicado y diferente de hace unos meses que puede derivar en situaciones que no se habían contemplado hasta ahora.
El Banco Central Europeo (BCE) celebró una reunión extraordinaria el viernes 17 y concluyó que la situación del Credit Suisse no tenía por qué afectar a los bancos europeos. Veremos si eso tranquiliza a los mercados.
Y la mayoría de análisis de bancos de inversión en España no ven un riesgo de contagio en los bancos españoles, al menos de momento, si la cosa no se complica.
En el caso español nos encontramos en un momento muy especial con unas elecciones por delante que hacen que las políticas monetarias internas sean muy laxas y muy enfocadas a conseguir votos en dichos comicios. Eso lleva a una falta de supervisión y decisiones que no mejoran precisamente la situación económica del país ni mucho menos la del sector financiero. El ejemplo son los impuestos extraordinarios a la banca y a las energéticas que entraron en vigor este año así como la reforma de las pensiones que ha introducido una carga adicional a empresas, autónomos y trabajadores en el peor momento de incertidumbre y de recuperación económica. Añadamos el impuesto al plástico y la inflación persistente que sufren los españoles, especialmente la llamada subyacente que afecta a la cesta de la compra diaria y productos de primera necesidad y necesario consumo. Añadamos la subida del Euribor a las hipotecas a tipo variable y la subida de combustibles y facturas de electricidad y gas, y tenemos el combo perfecto. Todo ello con la negativa del gobierno a deflactar las tarifas del IRPF por la inflación y con un gasto público y contrataciones públicas desbocados cara a comprar redes clientelares y votos agradecidos en las próximas elecciones. Y al final para que Tito Bernie y varios diputados socialistas se lo gasten en señoritas alegres, sustancias peligrosas y contratos amañados a través de mordidas con empresarios afines. Bienvenidos a la España social comunista.
Quiero pensar que tendremos por delante episodios de volatilidad en los mercados pero que no llegará la sangre al río. El BCE decidió seguir apostando por la lucha contra la inflación en su última reunión y subió los tipos oficiales otros 50 puntos básicos. Probablemente la última subida de esa cuantía aunque probablemente le queda otras dos de 25 puntos básicos antes de ya frenar en las subidas y esperar a ver los efectos en la economía y en la inflación. De hecho el Euribor estos días ha venido bajando por la inestabilidad financiera y ha vuelto a repuntar después de la subida de tipos del BCE pero de forma mucho menos agresiva. Probablemente pueda volver a acercarse al 4% pero parece claro que ese sería su techo. Al menos según las estimaciones que auguran las curvas de tipos a futuro y las de los bancos de inversión.
Con todo ello queridos lectores tendremos que tener calma y paciencia y esperar que nadie rompa nada más y podamos empezar a movernos en un terreno y campo de juego algo más estable y predecible a futuro que el que nos ha tocado vivir en los últimos años. No olviden que en el caso español estamos en año de elecciones y todavía veremos decisiones muy políticas y basadas en estrategias electorales más que en la ortodoxia económica financiera. Y no descarten más carpetazos como el de Ferrovial sin el gobierno sigue expoliando e insultando a nuestro tejido productivo, que por cierto se les olvida que son la base de la creación de empleo y riqueza. Especialmente las pequeñas y medianas empresas y autónomos (90% del PIB) que son los grandes olvidaos y odiados por este gobierno.
Les deseo suerte, salud y acierto en sus decisiones de inversión.
ÁLVARO SHARES
Puedes seguir a Álvaro Shares en Twitter como @AlvaroJuer

ÁLVARO SHARES es un licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por el CEU y la Universidad Autónoma de Madrid, que ha sobrevivido a 31 años de experiencia en la bolsa española, en firmas de primera fila del sector financiero como JP Morgan o BBVA, entre otras. Desde el año 86 ha visto y seguido la evolución del profundo cambio que han sufrido los mercados hasta la actualidad. Desde el crash del 87 hasta el Brexit del 2016, así como la evolución tecnológica y el desarrollo de nuevas alternativas de inversión, siempre de la mano de los principales inversores nacionales e internacionales. Mucho mundo a sus espaldas y muchos viajes con los principales directivos de las compañías españolas. Y con ganas de seguir aprendiendo.

1
Patrocina Ataraxia Magazine en PATREON desde 5$ (4,50€) al mes
https://www.patreon.com/ataraxiamagazine
2
Patrocina Ataraxia Magazine mediante una donación por PayPal
Puedo donar 5 euros
No es necesario tener cuenta abierta en PayPal para utilizar PayPal como plataforma o vía de donación • Si quisieras donar 10 o 15 euros puedes especificar (en la casilla junto al botón) que la cantidad que donas es 2 o 3 veces 5 euros…
5,00 €
Puedo donar 10 euros
No es necesario tener cuenta abierta en PayPal para utilizar PayPal como plataforma o vía de donación • Si quisieras donar 20 o 30 euros puedes especificar (en la casilla junto al botón) que la cantidad que donas es 2 o 3 veces 10 euros…
10,00 €
Puedo donar 20 euros
No es necesario tener cuenta abierta en PayPal para utilizar PayPal como plataforma o vía de donación • Si quisieras donar 40 o 60 euros puedes especificar (en la casilla junto al botón) que la cantidad que donas es 2 o 3 veces 20 euros…
20,00 €
Puedo donar 50 euros
No es necesario tener cuenta abierta en PayPal para utilizar PayPal como plataforma o vía de donación • Si quisieras donar 100 o 150 euros puedes especificar (en la casilla junto al botón) que la cantidad que donas es 2 o 3 veces 50 euros…
50,00 €
3
Patrocina Ataraxia Magazine con 2€ por lectura mensual
Aportaré por la lectura de cada número 2 euros mensuales
Aportaré 2 euros mensuales por leer Ataraxia Magazine, mediante un micropago utilizando PAYPAL (no es necesario tener cuenta en PayPal para efectuar el pago).
2,00 €
email de contacto: ataraxiamagazine@gmail.com
Patrocina AtaraxiaMagazine: https://www.patreon.com/ataraxiamagazine
Síguenos en Twitter: https://twitter.com/ataraxiamag
Síguenos en Facebook: https://www.facebook.com/ataraxiamagazine
